Por Miguel Angel Ferrari
El Centro de Militantes
para la
Democracia Argentina (Cemida), entidad que desde 2012 asumió
la continuidad del Centro de Militares para la Democracia Argentina ,
con la misma filosofía política, pero con la amplitud de contener en sus filas
no solo a militares sino también a civiles; ha emitido un comunicado en el que
denuncia que se ha desatado un “golpe blando” contra la Argentina y contra
Venezuela.
“Con los Ojos
del Sur”, columna de opinión emitida en “Hipótesis” el sábado 21 de febrero de
2015.
Con las firmas de su
presidente y de su secretaria, el coronel retirado José Luis García y la
profesora Elsa Bruzzone respectivamente, el
Cemida señala que esta actividad destituyente en ambos países sudamericanos, es
una respuesta de los Estados Unidos ante la manifestación de independencia de estos países al mandamiento
capitalista.
El Cemida
alertó que entre los instrumentos que se utilizan para el ataque a las instituciones
de la democracia, constan la manipulación psicológica, los operativos de
prensa, las agresiones económicas y el control por parte de organismos
internacionales; todas estas estrategias se implementan con la finalidad de
“instalar mundialmente un capitalismo liberal”, asegura la entidad firmante del
documento.
El comunicado
precisa que el esquema contiene “cómplices locales”, que pueden ser altos
funcionarios del Gobierno o del Congreso, que mantienen una permanente cercanía
con la Embajada
de los Estados Unidos, por lo que viajan con frecuencia a Washington para
recibir instrucciones e informar lo que ocurre en sus países.
Según el
Cemida “el intento del golpe blando se debe a la lucha por los mercados
globales y los recursos naturales estratégicos, como la energía, el petróleo,
los minerales, los ecosistemas, los alimentos y el agua potable”, por ello no
es casual que los principales organismos internaciones ordenen abrir los
mercados, mientras los países líderes causan perjuicios a otras naciones más
pequeñas, a través de los subsidios que les proporcionan a sus propios
productores.
El Centro de Militantes
para la
Democracia Argentina — luego de analizar las operaciones de
la derecha y el Poder Judicial— afirmó que el Gobierno constitucional de la
presidenta Cristina Fernández se enfrenta a un golpe de
Estado blando.
En su análisis, la profesora
Elsa Bruzzone y el coronel retirado José Luis García, advirtieron sobre las
“estrategias” de los Estados Unidos en la región latinoamericana, a propósito
de la incomodidad que les generan las acciones de integración que fomentan los
presidentes de América latina y el Caribe.
El Cemida afirma que “en su
conjunto el empleo de todas estas «estrategias» constituye lo que se ha
llamado «golpe de Estado blando» como el claramente desatado actualmente contra
la República
Bolivariana de Venezuela, país que se atrevió a propugnar
un Socialismo del Siglo XXI, con el consiguiente «peligro» de que
ese ejemplo se propague”.
En tanto que el ataque que está
soportando el gobierno argentino, es la resultante de ciertos "errores imperdonables
contra el sistema". Concretamente: la nacionalización de los fondos de
pensiones AFJP, del servicio de correos, de Aerolíneas Argentinas y de YPF; más
los acuerdos de cooperación económica
con Rusia y China.
Respecto
del “golpe blando” que se está operando en la Argentina , concepto que
compartimos totalmente, no vamos a hablar puesto que ya lo han hecho con total
claridad las columnas precedentes.
En cuanto al golpe de Estado denunciado por el
gobierno venezolano oportunamente y que nosotros abordamos en columnas
anteriores, debemos agregar que el presidente Nicolás Maduro informó el pasado
jueves la detención
del alcalde metropolitano, Antonio Ledezma, quien será procesado por delitos
cometidos contra la paz interior y su vinculación con los planes conspirativos
contra Venezuela.
Durante una
reunión con representantes de los siete Consejos Presidenciales del Poder
Popular del país, Maduro dijo que el dirigente opositor “fue capturado por
órdenes de la Fiscalía
y va a ser procesado por la justicia venezolana para que responda por todos los
delitos cometidos contra la paz del país, la seguridad y la Constitución ”.
Recordemos
que tanto Antonio Ledezma, como la ex diputada María Corina Machado y el ex
alcalde del municipio Chacao, Leopoldo López Mendoza, en prisión por incitación
a la violencia durante los sucesos sangrientos de febrero del año pasado;
tuvieron una plena participación en el golpe de Estado de abril de 2002,
felizmente fallido gracias a la masiva participación de los sectores más
humildes de Caracas.
Frente
a estas medidas —en defensa de la democracia venezolana— adoptadas por el
gobierno bolivariano, se han levantado numerosas voces de la derecha continental.
Estas voces las encabeza el Departamento de Estado de los Estados Unidos, a ellas
se sumaron, entre otros, los ex presidentes Andrés Pastrana Arango (de
Colombia) y el pinochetista Sebastián Piñera.
En un
vergonzoso comunicado de prensa que ofende las mejores tradiciones de la Unión Cívica Radical, el
presidente del Comité Nacional partidario y la presidenta de la Convención Nacional ,
Ernesto Sanz y Lilia Puig de Stubrin, respectivamente, expresan:
“El arresto del Alcalde de
Caracas Antonio Ledezma es un nuevo movimiento del gobierno venezolano, con la
finalidad de fortalecer un régimen que se sustenta en el autoritarismo, el
miedo y el cese de libertades esenciales en la vida democrática.
“Los populismos
latinoamericanos crearon poder político en base a sus relativos éxitos
económicos. Con la economía en declive, sólo pueden sostener el autoritarismo
con más violencia e intolerancia, que por estos días ha entrado en una base
extremadamente delicada para la integridad de las instituciones democráticas en
Venezuela”.
Para finalizar diciendo: “Exigiremos
en el Congreso de la Nación
que el Poder Ejecutivo Nacional a través del Ministerio de Relaciones
Exteriores, impulse acciones, tanto en Mercosur como Unasur, con el objetivo de
lograr la liberación de todos los presos políticos privados del ejercicio de
sus derechos en Venezuela”.
Si
cupiera alguna duda sobre la existencia de “cómplices locales” de los “golpes
bandos”, a los que alude la declaración del Cemida, este comunicado de prensa
de la Unión Cívica
Radical nos da una perfecta pista en tal sentido.
Si bien,
a lo largo de reiteradas notas editoriales, hemos informado sobre esta
modalidad de los “golpes suaves” o “golpes blandos”, pergeñada por el
politólogo estadounidense Gene Sharp; la lectura de una nota firmada por Emilio
Fuentes en el blog “Todo cambia”, nos motivó a difundir un ilustrativo esquema
de esta actividad golpista.
Esta es
la secuencia:
Primera
etapa: “ablandamiento” (empleando la guerra de cuarta generación)
·
Desarrollo de matrices de opinión
centradas en déficits reales o potenciales.
·
Profundización de los conflictos y promoción del
descontento.
·
Promoción de factores de malestar, entre los que
destacan: desabastecimiento, criminalidad, inseguridad, manipulación del dólar,
paro patronal (lockout) y otros.
·
Denuncias de corrupción, promoción de intrigas
sectarias y fractura de la unidad.
Segunda
etapa: “deslegitimación”
·
Manipulación de los prejuicios anticomunistas o
antipopulistas.
·
Impulso de campañas publicitarias en
defensa de la libertad de prensa, derechos humanos y libertades públicas.
·
Acusaciones de totalitarismo y pensamiento único.
·
Fractura ético-política.
Tercera
etapa: “calentamiento de calle”
·
Fomento de las movilizaciones callejeras.
·
Elaboración de una plataforma de lucha que
globalice las demandas políticas y sociales.
·
Generalización de todo tipo de protestas, magnificando
fallas y errores gubernamentales.
·
Organización de manifestaciones y tomas de
instituciones públicas (no respeto a las instituciones) que radicalicen
la confrontación.
Cuarta
etapa: “combinación de diversas formas de lucha”
·
Organización de marchas y tomas de instituciones
emblemáticas, con el objeto de coparlas y convertirlas en plataforma
publicitaria.
·
Desarrollo de operaciones de guerra psicológica
y acciones armadas para justificar medidas represivas y crear un
clima de ingobernabilidad.
·
Impulso de campaña de rumores entre fuerzas
militares y tratar de desmoralizar a los organismos de seguridad.
Quinta
—y última— etapa: “fractura institucional”
·
Sobre la base de
las acciones callejeras, tomas de instituciones y pronunciamientos
militares, se obliga la renuncia del presidente.
·
En casos de fracasos, se mantiene la presión de
calle y se migra hacia la resistencia armada.
·
Preparación del terreno para una intervención
militar o el desarrollo de una guerra civil prolongada.
·
Promoción del aislamiento internacional
y el cerco económico.
Obviamente,
este es un esquema que no necesariamente deberá seguir puntualmente todos los
pasos aquí anunciados. Su aplicación tendrá la flexibilidad necesaria, según
las condiciones particulares de cada país.
Recordemos
que Gene Sharp —el ideólogo de los “golpes suaves”— en su libro “De la
dictadura a la democracia”, describe 198 métodos para derrocar gobiernos.
Frente a estos graves
peligros generados por el imperio y acompañados por sus laderos locales, nunca
han tenido más vigencia que hoy aquellas palabras de John William Cooke, al
señalar “con la resistencia no alcanza, sin cotraataque no hay victoria”.