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Nadie puede negar que —en materia de
política internacional— ésta fue una semana muy especial.
Comenzó con el rotundo rechazo del pueblo
griego a las políticas de ajuste de la Comisión Europea ,
del Fondo Monetario Internacional y del Banco Europeo (la famosa Troika) y,
fundamentalmente, a la descarada intromisión en sus políticas internas.
“Con los Ojos
del Sur”, columna de opinión emitida el sábado 11 de julio de 2015.
Prosiguió con la visita papal a Ecuador,
Bolivia y Paraguay —donde todavía se encuentra—, durante la cual los mensajes
del Pontífice fueron desgranando minuciosamente las enfermedades de la sociedad
capitalista, hasta llegar al punto culminante en su mensaje de Santa Cruz de la Sierra , Bolivia, cuando
dijo que a este sistema los pueblos ya no lo aguantan; y cuando pidió perdón en
nombre de la Iglesia Católica
por “los crímenes contra los pueblos originarios durante la llamada conquista
de América”.
En paralelo con estos acontecimientos, en
una remota ciudad rusa, al pie de los montes Urales, llamada Ufá, tuvo lugar la Séptima Cumbre del grupo de los
BRICS. Esto es, Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
También en esa ciudad, se realizó una
nueva cumbre de la
Organización de Cooperación de Shanghai, institución
intergubernamental fundada en 1996 por Rusia, China, Kazajstán, Kirguisia y
Tayikistán. A la que luego se incorporó Uzbekistán y muy recientemente la India y Pakistán.
oOo
El tema de la visita papal lo abordó
nuestro colega Julio Gambina en su columna de hoy. En consecuencia, solo nos
detendremos para mencionar un hecho simbólico que fue manipulado por los medios
masivos de desinformación.
Durante su estancia en Bolivia, el Papa
Francisco recibió de manos del presidente Evo Morales un obsequio muy
particular: una hoz y un martillo, tallado en madera, con la imagen de Cristo
crucificado sobre el martillo.
Este presente, que el Papa recibió primero
con sorpresa y luego con beneplácito, no fue —precisamente— una provocación o
una torpeza del presidente boliviano, como deslizaron irresponsablemente muchos
plumíferos puestos a periodistas; se trató de una talla efectuada por el sacerdote
jesuita Luis Espinal, torturado y asesinado en 1980 por la dictadura de turno
de Bolivia.
El presidente Evo Morales recordó que “el padre
Espinal ha estado con los pobres, ha sido torturado antes de ser asesinado. Ese
padre ha diseñado, ha tallado, ha hecho la cruz con el martillo y la hoz”.
El Papa Francisco rindió homenaje al padre
Espinal, rezando ante el lugar donde su cuerpo torturado y acribillado fue
encontrado en La Paz.
El sacerdote jesuita plasmó en esa talla
un enorme mensaje profético, adelantándose más de tres décadas a este presente
donde la contradicción no pasa entre creyentes y no creyentes, sino entre
quienes más allá de sus convicciones filosóficas o religiosas, han sabido unir
sus esfuerzos para alcanzar sociedades donde los seres humanos vivan con
dignidad, por un lado…
Y por el otro, entre quienes siguen
sosteniendo con guerras esta sociedad injusta, hay también creyentes y no
creyentes.
A los belicistas de la OTAN , que siguen empecinados
en destruir países a lo largo de todo el mundo, los tiene sin cuidado si los
gobernantes de Gran Bretaña, Holanda o Alemania, son miembros de iglesias
reformadas; o si los dirigentes de Francia o Italia, son socialdemócratas
librepensadores e, incluso, ateos.
De modo que las estupideces pronunciadas respecto
del Cristo de la hoz y el martillo, solo pretenden tapar con una escuálida mano
el maravilloso sol de la unidad de los pueblos, de la unidad emancipadora en
este cambio de época.
oOo
Por su parte, el tema de Grecia no para de
dar sorpresas.
Tras el monumental NO pronunciado por el
pueblo griego a las políticas de ajuste, el propio primer ministro Alexis
Tsipras acaba de presentar a la
Troika una propuesta que —con algunos retoques— contiene los
ajustes reclamados por la
Eurozona y rechazados por el pueblo el domingo pasado.
Pero antes de entrar en las
consideraciones de esta voltereta de Tsipras, creemos que es necesario
detenernos un instante en la reacción de la cúpula del capitalismo mundial ante
la convocatoria del mencionado referéndum griego.
Esta apelación a la soberanía ciudadana
causó sorpresa e, incluso, indignación en las más altas esferas.
Ocurre que los gobernantes neoliberales de
Europa se han acostumbrado a manejar la cosa pública, la “res publica” como
decían los romanos, sin la participación de los ciudadanos.
El neoliberalismo considera a la
democracia en un escalón bastante inferior respecto del mercado. O, para ser
más precisos, del espacio económico gobernado abiertamente por sus intereses.
La crisis griega, más allá de su
desenvolvimiento, ha puesto de manifiesto claramente (no lo han podido
disimular) que el concepto “democracia” es incompatible con el de
“capitalismo”.
Ahora regresamos a las volteretas de
Alexis Tsipras…
Estas volteretas —en nuestra opinión— no
son una simple expresión de oportunismo por parte del líder de Syriza. Están
enmarcadas en una severa contradicción que atraviesa a la propia ciudadanía
griega.
En el mencionado referéndum, un 61 por
ciento votó por el NO al ajuste de la Eruozona ; pero un guarismo similar —según
relevamientos confiables— se inclina por la permanencia en la Europa del euro, aún a
sabiendas de los padecimientos que han experimentado y los que tendrán que
soportar.
A menos de una semana del triunfo del NO,
el primer ministro estuvo hasta la madrugada de este sábado, tratando de
convencer a los parlamentarios que aprueben la propuesta de ajuste que ha
elevado a la Troika.
Lo logró, con el voto de los partidos de
derecha y con la deserción de varios de sus diputados.
En la coyuntura, el gobierno griego patea
la pelota para adelante, pero engrosa la deuda de manera astronómica… podría
escalar al equivalente de dos PBI.
Su objetivo de mediano plazo es,
obviamente, una quita significativa de la deuda.
El Fondo Monetario Internacional, Francia
e Italia, podrían apoyar una iniciativa de este tipo; pero Alemania —la
“locomotora de Europa”— no es para nada proclive a esta alternativa.
Un final abierto, donde la
prestidigitación no es garantía de éxito cuando se está frente al dueño del
circo.
oOo
En la cumbre del BRICS, realizada —también
esta semana— en Rusia, se analizó todo lo relativo a la cooperación financiera
entre los estados miembros. Se revelaron los detalles de su nuevo banco de
desarrollo, así como de su Acuerdo de Reservas de Contingencia.
Recordemos que
los BRICS representan juntos el 45 por ciento de la
población mundial, el 17 por ciento del comercio internacional y casi el 30 por
ciento del Producto Interno Bruto del planeta.
En cuanto al Banco de Desarrollo de los
BRICS, digamos que el volumen de la reserva ha sido establecido en 100.000
millones de dólares estadounidenses. Recordemos que el acuerdo de creación del
fondo fue firmado hace un año, el 15 de julio de 2014, durante la Sexta Cumbre realizada en
Fortaleza, Brasil.
El ministro de Desarrollo Económico de
Rusia, Alexéi Ulukáev, se refirió al banco señalando "será una de las
instituciones financieras principales del mundo y se especializará en proyectos
de infraestructura, en las esferas que permitan aliviar puntos críticos y
contribuirá al desarrollo del comercio tanto a nivel privado como estatal".
Tras señalar que no está de acuerdo con la
falta de reformas del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, el
ministro ruso puntualizó "de momento los colegas que trabajan en estas
instituciones financieras internacionales no logran estar a la altura de los
tiempos y las reformas se están retrasando. Nosotros no podemos perder el
tiempo y estamos creando mecanismos adicionales".
Un verdadero desafío a las instituciones
financieras creadas por Occidente tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial y que tanto daño hicieron y hacen a las economías de los países llamados emergentes.
El Papa Francisco anuncia que el actual
sistema económico no da más; Grecia —con sus idas y vueltas— pone en figurillas
al gobierno de Angela Merkel y su locomotora germánica; y los BRICS y la Organización de
Cooperación de Shanghai, liderada por China, disputando la hegemonía a
Occidente, completan el cuadro de una semana que preanuncia un futuro de transformaciones.
¡Cuidado que los que sostienen lo viejo se
preparan siempre para nuevas guerras!