Por Ester Stekelberg
stekelberg@gmail.com"Contratapa", columna de opinión emitida en "Hipótesis" el sábado 22 de julio de 2017
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Entre el 16 y el 17 de julio de 1942, más de 13 000 judíos de entre 2 y 60 años, fueron arrancados de sus hogares por sorpresa en Paris y su aglomeración por el régimen colaboracionista de Vichy, en el marco de la operación nazi, “Viento primaveral”. El jefe de la policía nacional, movilizó con instrucciones precisas a 9000 policías que iban a realizar esta operación. Los arrestados,--más de un tercio eran niños--, serían posteriormente deportados al campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau. Menos de 100, de los 13 000, volvieron.
Este episodio es conocido como “la Redada del
Velódromo de Invierno” y en francés “La Rafle du Vél d’hiv”, debido a que una
gran parte de los arrestados, antes de la deportación, fue retenida en un
velódromo cubierto de la capital francesa del distrito 15, que sirvió como
cárcel provisoria. En espantosas condiciones de arresto, las familias fueron separadas,
la mayoría no volvería a reunirse jamás.
Este año se cumplieron los 75 del episodio y como cada
año en que el presidente en funciones realiza un homenaje a las víctimas, el primer
mandatario actual, Emmanuel Macron hizo lo propio. Con un detalle, por lo menos
inesperado y que generó fuertes polémicas. Macron invitó al homenaje al premier
israelí Benjamín Netanyahu. Y es la primera vez que un jefe de estado francés
invita a un dirigente israelí a esta jornada por la Memoria. Este juego
diplomático, que empezó un par de días antes con el arribo a la celebración el
14 de julio, de su par yanqui Donald Trump, generó --como decíamos-- una fuerte
reacción en diversos sectores, entre ellos en la UFJP, la Unión francesa de
judíos por la Paz.
Para hablar sobre el tema, consultamos a quien fuera
durante 8 años presidente de la entidad anti sionista, Pierre Stambul, hoy
militante activo además, de la campaña BDS Francia (Boicot, Desinversiones y
Sanciones contra el gobierno sionista de Israel). Lo escuchamos.