DE HEROES Y MARTIRES CHILENOS

Por Luis Saavedra 
elidaluis@gmail.com

Las decisivas elecciones que ayer, 15 de diciembre, se celebraron en la hermana República de Chile, dejaron en segundo plano la conmemoración de un hecho que sucedieron en igual fecha de 1531: el nacimiento de Caupolicán, líder mapuche. 
A la llegada de los españoles habitaban el sur de Chile y una franja del sudoeste argentino los mapuches, pueblo originario que se daba a sí mismo este nombre, que en su idioma mapudungún quiera decir gente de la tierra.
"Momentos de Memoriacolumna de opinión emitida en "Hipótesis" el sábado 16 de diciembre de 2013.

Los españoles los llamaron araucanos, nombre que Alonso de Ercilla utiliza en su obra La Araucana, en la que hace un vivo relato de la guerra contra los invasores llevada adelante por los mapuches, dirigidos primero por Lautaro y luego por Caupolicán.
Lautaro es considerado por los historiadores de la guerra un gran estratega, a la par de otros famosos como Alejandro Magno, Aníbal o Napoleón.
Cuando tenía 11 años fue capturado por los españoles y utilizado como yanacona, palabra que viene del quechua, que en el imperio incaico era una situación de ayuda mutua, pero en el español tenía el carácter de servidor en la paz y de indio auxiliar en la guerra.
Nombrado más adelante paje personal del conquistador Pedro de Valdivia,  aprendió de los españoles el uso del caballo y las tácticas de la guerra.
Luego de fugarse del campamento español, llamó a su pueblo a la lucha, les enseñó las tácticas guerreras aprendidas con sus jefes españoles, adaptándola a su propia idiosincrasia de pueblo libre y democrático.
Elegido toqui o jefe de guerra, libró numerosas batallas victoriosas contra el invasor, llegando a capturar y ejecutar al propio Pedro de Valdivia.
Murió finalmente en combate, pero quedó como símbolo de la lucha de su pueblo y por eso los libertadores del siglo XIX dieron su nombre a la Logia que organizaron para luchar por la Independencia.
Durante un tiempo los mapuches sufrieron derrotas por la falta de un hábil  jefe de guerra, hasta que eligieron toqui a Caupolicán, quien había participado en las batallas de Lautaro.
Obtuvo también victorias, aunque sin llegar al genio de Lautaro. Derrotado y capturado por la traición del yanacona Andresillo, los conquistadores lo condenaron a la terrible muerte por empalamiento, que recuerda Alonso de Ercilla, Rubén Darío, Pablo Neruda y otros poetas.
Según el relato de Ercilla, Caupolicán no mostró temor alguno, de una patada sacó al verdugo del tablado y se sentó el mismo sobre la pica, muriendo por perforación intestinal sin manifestar el dolor terrible que significaba aquella muerte.
Los españoles no lograron dominar nunca a los mapuches, que se mantuvieron independientes al sur del río Bío Bío. Fueron sus descendientes criollos quienes llevaron adelante la tarea genocida a ambos lados de la cordillera.
De nuestro lado, el general Julio Argentino Roca emprendió  la llamada Conquista del Desierto, una operación de genocidio y saqueo, apoyada económicamente por la Sociedad Rural, en 1879.
Del lado chileno, varios gobiernos sucesivos, llevaron adelante, entre 1861 y 1883 la llamada Pacificación de la Araucanía.
En ambos lados de la cordillera los mapuches sobrevivientes luchan por sus derechos, a la tierra, a la lengua y a su forma de vida.
Los mapuches trasandinos son más numerosos que los argentinos y sus luchas mucho más duras. Hay una cantidad importante de luchadores presos y se han llevado adelante movilizaciones por su libertad, que los detenidos suelen acompañar con valerosas huelgas de hambre.
El rechazo al invasor sigue vivo en sus corazones a tal punto que no se consideran a sí mismo chilenos, aún cuando las circunstancias los obliguen a utilizar documentos emitidos por el estado de ese país.
El espíritu de Lautaro y Caupolicán sigue vivo en lo que los gobernantes blancos llaman la Araucanía y constituye una de las 15 regiones en que se divide Chile, país de constitución unitaria, siendo los Intendentes de las regiones elegidos a dedo por la presidencia de la República.

Nunca eligieron un mapuche Intendente de la Araucanía.