LUCES Y SOMBRAS

Por Miguel Angel Ferrari
miguelferrari@gmail.com

Cada vez que el presidente Mauricio Macri se instalaba en su despacho de la Casa Rosada, donde está el sillón de Balcarce… el de Rivadavia no… el de Balcarce, su perro… al presidente le dolía la cabeza.

Felizmente por consejos de su “maestra”, se procedió a “limpiar” el espacio con diversas técnicas “algunas religiosas y otras no” —según informó el diario “Clarín”— y felizmente el primer magistrado ya no debe soportar esas molestas migrañas.


“Política Nacional”, columna de opinión emitida en “Hipótesis” el sábado 30 de enero de 2016.
También se procedió del mismo modo en la quinta de Olivos, donde por suerte se eliminaron esos efluvios tan molestos.

Ahora el dolor de cabeza lo padecen los trabajadores despedidos y los que temen correr la misma suerte que sus compañeros.

Una suerte de “Despidómetro” elaborado por nuestra producción, da cuenta de estas cifras provisorias, dado que los despidos se suceden de manera vertiginosa:

*      Fabricaciones Militares: 140 en la sede central de Bs. As.. No hay listas de despedidos en las fábricas, donde hay estado de alerta.
*      Banco Central: 47.
*      Secretaría General de la Casa Rosada: 50.
*      Jefatura de Gabinete Nacional: 105.
*      Ministerio de Justicia de la Nación: 486.
*      Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación: se estudian listados.
*      Ministerio de Cultura: 480.
*      Dirección de Violencia Familiar de la Prov. de Córdoba: 25.
*      Secretaria de Niñez y Adolescencia (SENAF) Córdoba: 76.
*      Complejo La Esperanza de Córdoba: 26.
*      Secretaría de Trata de Personas, Cba.: 14.
*      Refugio de Menores, Cba.: 4.
*      Curtiembre Sadesa S. A. prov. Sta. Fe: anunció 150 y cierre.
*      Municipio Cerrillos (Salta): represión policial por despidos s/cifras.
*      Ministerio de Economía (Pcia. Bs. As.): UPCN logró reincorporaciones de despedidos.
*      Petroleros del Chubut: negocian evitar 5.000 despidos.
*      Laboratorios Bayer en la localidad de Munro, pcia. Bs. As.: 20.
*      Municipalidad de La Plata: 1.900.
*      Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos, que depende del ministerio de Transporte de la Nación: 34.
*      ARSAT: 22, muy capacitados.
*      Municipalidad de Quilmes: sin cifras concretas, pero con la decisión de realizar despidos.
*      Centro Cultural Kirchner: 600.
*      Senado de la Nación: 2.035, luego Michetti reincorporó a los trabajadores con capacidades diferentes.
*      Cámara de Diputados de la Nación: 100.
*      Sol Líneas Aéreas: por ahora se revirtió el despido de 220 trabajadores, a la espera de que la empresa sea adquirida.

Ayer hubo numerosas marchas y “ñoquiadas” (los ñoquis del 29) para repudiar estos despidos.

Como hemos dicho en nuestros comentarios anteriores, que entre tantos despedidos haya quienes no cumplen con sus tareas, bajo ningún punto de vista es un motivo para blanquear esta oleada de cesantías.

Un gobierno responsable debería tratar cada caso en particular.

Si bien este tema de los despidos se constituye en uno de los problemas más acuciantes, por la problemática individual y social que ello implica, esta verdadera catarata de medidas antipopulares, antinacionales y antidemocráticas sigue destruyendo de manera sistemática todo lo construido en los últimos tiempos.

En un gesto de agradecimiento por esta demolición, dirigentes de la Asociación Empresaria Argentina, entre quienes destacaba Héctor Magnetto, mantuvieron el pasado miércoles una reunión con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, con el objeto de analizar la situación del país y "trabajar de manera conjunta".

En la Casa de Gobierno estuvieron también los ministros de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, y de Producción, Francisco Cabrera, así como el secretario de Comercio, Miguel Braun, y el Secretario de Coordinación de Políticas Públicas, Gustavo Lopetegui.

Magnetto, por su parte, estuvo acompañado por Luis Pagani (Arcor), Paolo Rocca (Techint), Carlos Miguens (Grupo Miguens), Aldo Roggio (Grupo Roggio), José Cartellone (Construcciones Civiles) y Cristiano Rattazzi (Fiat), entre otros.

A comienzos de semana, en la misma sintonía que —en su momento— los diarios La Nación y El Litoral, el ministro de Cultura porteño, Darío Lopérfido, en un encuentro en Pinamar, donde habló sobre los procesos de violencia política, trató de relativizar el genocidio cometido en el país por la dictadura cívico-militar. Manifestó “en la Argentina no hubo 30.000 desaparecidos" y deslizó la versión de que "ese número se arregló en una mesa".

(audio Lopérfido)

La perfidia del funcionario del Pro consiste en poner en tela de juicio —de modo banal— el accionar de la Justicia respecto de los responsables del terrorismo de Estado en la Argentina.

A este brulote —del que se despegó rápidamente el ministro de Justicia, Germán Garavano— le salieron al cruce referentes de los organismos de Derechos Humanos encabezados por la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, que extendieron su malestar al presidente Mauricio Macri, por su decisión de no recibir a las organizaciones de derechos humanos y derivar un pedido de audiencia a su jefe de Gabinete, Marcos Peña.

Por su parte, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, adelantó que el Ejecutivo firmará un "decreto corrector" del que aumentó en un 170 por ciento los fondos de coparticipación para el gobierno porteño con el objetivo de que "se transfiera estrictamente el costo del traspaso de la Policía Federal".

El decreto que hace una semana aumentó de 1,4 a 3,7 por ciento los fondos coparticipables para la Ciudad de Buenos Aires fue el detonante de una reunión entre los gobernadores del Frente para la Victoria el sábado pasado en San Juan.

Hasta aquí, dos lecturas.

Una, este gobierno va por todo hasta que se encuentra con escollos. En esos casos, algunas veces suele retroceder.

La otra, tiene que ver con la naturalidad que los gobernantes le atribuyen al “costo del traspaso de