miguelferrari@gmail.com
Mañana —domingo 10 de abril— se realizarán elecciones generales en
Perú. Cerca de 23 millones de peruanos
están habilitados para acudir a las urnas. Elegirán un presidente y 130
congresistas para el período 2016-2021.
“Con los Ojos
del Sur”, columna de opinión emitida el sábado 9 de abril de 2016.
Si ninguno de los diez candidatos presidenciales obtiene al menos
el 50 por ciento más uno de los votos, los dos primeros irán a un balotaje el 5
de junio.
Los candidatos presidenciales más destacados son Keiko Fujimori, por el partido Fuerza Popular; Pedro Pablo Kuczynski, por el partido Peruanos Por el Kambio; Verónika Mendoza, por el Frente Amplio, Alfredo Barnechea, por Acción Popular; Álan García, por Alianza Popular; Gregorio Santos, por Democracia Directa; y Alejandro Toledo, por Perú Posible.
Recordemos que Álan García y Alejandro Toledo ocuparon, en su momento, la primera magistratura del País.
De estos candidatos, la que encabeza los sondeos es Keiko Fujimori, hija del dictador Alberto Fujimori, quien se encuentra cumpliendo una condena a 25 años de cárcel por corrupción y violación de los derechos humanos. Esta candidata cuenta con un apoyo que oscila entre el 30 y el 35 por ciento.
Al tiempo que es la candidata que más oposición encuentra entre los electores. Más de un cincuenta por ciento ha expresado que no votará por ella. Situación ésta que la comprometería seriamente ante un inevitable balotaje.
Pelean por el segundo lugar, Verónika Mendoza, joven congresista del izquierdista Frente Amplio, y el veterano ex ministro y economista neoliberal Pedro Pablo Kuzcynski. Los sondeos de cuatro encuestadoras realizados esta semana los ubican en un empate técnico. De entre estos dos candidatos saldrá quien competirá en la segunda vuelta con Keiko Fujimori.
Los indecisos fluctúan entre 6 y 9 por ciento. La mayor parte de ellos están en los sectores populares y las zonas rurales, lo que podría favorecer a Verónika Mendoza, la candidata de la izquierda.
Casi todos los candidatos que quedan en campaña (muchos
fueron excluidos por diversas razones legales) parecen estar blindados. No
alcanzaron los videos mostrando que Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski
dieron dádivas en mítines políticos para que el Jurado Nacional de Elecciones
los excluyera de la campaña.
Los casos de corrupción y de violaciones a los derechos
humanos cometidos durante los mandatos de Alan García y el periodo en que Keiko
fuera primera dama, tampoco han sido suficientes para mellar su cinismo e
inducirlos a decidir a dar un paso al costado por respeto al pueblo peruano.
Pedro Pablo Kuczynski continúa presentándose como la
alternativa, “el gran tecnócrata”, sin importarle que es de conocimiento
público que, como ministro de Economía y luego primer ministro, ejecutó uno de
los más suculentos obsequios de los recursos gasíferos de Camisea (en el
departamento del Cusco), regalando alrededor de 15 mil millones de dólares en
beneficios a empresas extranjeras.
Esa cara de piedra de algunos de los candidatos, les sirve
para que el nuevo escándalo de evasiones fiscales —a gran escala—, destapado
el domingo con los “Papeles de Panamá”, también les resbale. Como pretende que
le ocurra al presidente Mauricio Macri.
Pedro Pablo Kuczynski, Keiko Fujimori, Álan García y Alejandro
Toledo están involucrados en el uso de estos paraísos fiscales, para lavar
dinero o evadir impuestos.
Pero los medios masivos de desinformación del establishment
peruano, equivalentes al Grupo Clarín argentino, no dicen una sola palabra
sobre la deplorable conducta de estos candidatos. Mientras que, por el
contrario, se dedican a calumniar sistemáticamente a la candidata izquierdista
Verónika Mendoza, cuya trayectoria no presenta —en absoluto— las miserias
morales de sus contrincantes.
Esta embestida de los grupos corporativos está expresando su
temor a que Mendoza se ubique en el segundo lugar, por sobre Kuczynski,
accediendo de este modo al balotaje, con posibilidades de ganar.
Recordemos que la favorita Keiko Fujimori tiene más de medio
país dispuesto a votarle en contra.
Esta candidata ahora se ve envuelta en el escándalo Panama Papers, debido a que uno de los donantes del partido Fuerza Popular, Jorge Javier Yoshiyama Sasaki, quien representa a Fujimori, aparece en los mencionados documentos. Él, junto a su esposa Joon Lim Lee Park, han otorgado más de 380 mil soles (más de 11 mil dólares) para la campaña presidencial de Keiko Fujimori en 2011 y en la actual.
El pasado martes, 5 de abril, en el marco del 24º aniversario del autogolpe del padre de Keiko Fujimori, miles de manifestantes hicieron la marcha más multitudinaria en Perú desde el fin de la dictadura del ex mandatario Alberto Fujimori. Los manifestantes pedían la exclusión de Keiko de los comicios presidenciales, demostrando su rechazo y temor a las promesas que posiblemente serán incumplidas, tal como lo hizo su padre.
A propósito del Perú, una reciente información da cuenta que el escritor peruano Mario Vargas Llosa también aparece mencionado en los Panama Papers por su presunta participación como accionista en una sociedad extraterritorial (“offshore”) radicada en las Islas Vírgenes Británicas.
Según
las informaciones circulantes el literato “estuvo muy cerca de controlar la
compañía Talome Services Corp junto a su ex esposa Patricia Llosa durante un
breve período en 2010” . La
desvinculación con esta sociedad, que fue comprada por la pareja al bufete
especializado de Mossack Fonseca a través del intermediario Dave Marriner, la concretó
Vargas Llosa días antes de que se emitiera el fallo del premio Nobel de
Literatura de 2010, que recibió el 10 de diciembre, según revela la
filtración. Desde el primero de septiembre de 2010, 500 de las mil
acciones de la compañía eran de Patricia Llosa y las restantes del escritor.
Ante
tanta corrupción, protagonizada por las clases dominantes, tanto en Perú, como
en la Argentina
y en el mundo, no está mal recordar este tramo de un decreto del General José
de San Martín, del 21 de agosto de 1821, desde su cargo de gobernante del Perú…
“Cuando
la humanidad ha sido altamente ultrajada y por largo tiempo violados sus
derechos, es un grande acto de justicia, si no resarcirlos enteramente, al
menos dar los primeros pasos al cumplimiento del más santo de todos los
deberes. Una porción numerosa de nuestra especie ha sido hasta hoy mirada como
un efecto permutable y sujeta a los cálculos de un tráfico criminal. Los
hombres han comprado a los hombres y no se han avergonzado de degradar la
familia a que pertenecen vendiéndose unos a otros”.
